martes, 4 de diciembre de 2007

No fue para tanto


Siento haber tardado tanto en contar como el fue el tan esperado concierto de los Arctic, pero una terrible infección de garganta, me ha mantenido apartada de cualquier tipo de actividad...

El concierto

Bueno, pues resumiendo mucho yo diría que, aunque a una gran fan como yo le cueste reconocerlo, no fue para tanto. Llegar, tocar y marchar. Así fue.

Para empezar el sonido fue penoso, como ya es habitual en la Riviera. El concierto corto y con un repertorio mal elegido y mal colocado. La actitud del grupo nula. Aunque esto ya es una actitud en sí misma, demostrar que lo que haces te gusta y que éste "gig" es más que un puro trámite, nunca está de más.
Para los que íbamos con tantas expectativas, decepcionaron. Para los que iban a ver que se encontraban, estuvieron correctos. Eché de memos canciones como Mardy Bum o 505. Cada minuto que pasaba esperaba que el grupo se fuera calentando y diese un poco más de espectáculo. Con I bet you look good on the dancefloor y Brainstorm hicieron brincar hasta al más sereno de los asistentes. Fake tales of San Francisco fue para mi el climax del espectáculo. Uno de los pocos momentos donde el grupo me pareció digno de admiración.

Lo que no se puede negar, aunque sean unos niñatos ingleses a los que todavía les cueste afrontar el éxito y la fama, es que tocan bien, su batería es increíble (practica boxeo para poder golpear el instrumento con la suficiente fuerza) y a Alex no le falla la voz. Después de ochenta minutos de canciones enlazadas, en las que apenas hubo espacio para los aplausos, pusieron punto y final. El público pidió más pero el grupo no salió. Cuando acabaron mi amigo Pepe me dijo: "Suenan mejor en un vídeo de Youtube".

El público

Una mezcla de pijos, indies, hooligans ingleses con banderas de Inglaterra borrachos como cubas, entendidillos musicales, y quinceañeros, que agradecieron mucho que fueran tan puntuales porque así podían estar a las 11 en casa.

Los teloneros

Estuvieron muy bien. Sonaban mejor que los monos árticos y cumplieron muy bien con su misión de calentar el ambiente. Se llaman Reverend And The Makers, son también de Sheffield. Muy recomendables.

De todos modos, sigo estando muy agradecida. Si hace un mes me dicen que voy a ver a los Arctic y que incluso voy hablar con ellos, no me hubiera creído. Y bueno, a pesar de todo siguen siendo gran banda...Ya estoy esperando la próxima vez para comprobar que lo del viernes fue un mal día.

2 comentarios:

Antoine Doinel dijo...

"Una mezcla de pijos, indies, hooligans ingleses con banderas de Inglaterra borrachos como cubas, entendidillos musicales, y quinceañeros, que agradecieron mucho que fueran tan puntuales porque así podían estar a las 11 en casa."

exacto!

Antoine Doinel dijo...

gracias por comentar en POTQ!